Vivimos juzgándonos, necesitamos tener siempre la certeza de
que hemos hecho las cosas “bien”, pero en que nos basamos?
Equivocarse no significa fracasar, a veces, que las cosas no
salgan como esperamos puede ser una buena señal, una manera que tiene la vida de enseñarnos de que
nuestro camino no es por ahí… Y siempre tras atravesar alguna dificultad
adquirimos experiencia, incluso cuando sabemos que podríamos haber hecho las
cosas de otra manera o “mejor”, estamos aprendiendo del proceso.
En ocasiones somos realmente duros y exigentes con nosotros
mismos pero son realmente las pequeñas o grandes crisis que vivimos a lo largo
de nuestra vida las que nos forman, nos hacen ver las cosas desde otra
perspectiva, nos ayudan a crecer y hasta permiten que desarrollemos capacidades
dormidas. Por eso es interesante el plantearse las dificultades como retos y los
“errores” como aprendizajes.
Ahora bien, si crees que has fracasado en algún aspecto,
permítete pensar en que solo fue una enseñanza. Podemos asumir que nos hemos
equivocado, sin culpas y sin castigos, con responsabilidad y con amor.
“No debemos tener miedo a equivocarnos, hasta los planetas
chocan y del caos nacen estrellas" Charles Chaplin.
La vida es sueño, decia Calderon de la Barca, y si es asi, nunca estariamos fracasando sino solo experimentando..... pero claro habria que hacerselo entender a nuestra mente.....quien toma todo a rajatabla..
ResponderEliminarEntonces habrá que estar bien despiertos para vivirla soñando! :)
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