Que el 2015 nos enseñe a vivir con menos apegos

Es mi deseo más profundo, que el 2015 nos enseñe a vivir con menos apegos, y creo que para que esto sea posible sólo necesitamos una cosa: más amor. Más amor a la hora de tomar decisiones, a la hora de realizar nuestras tareas cotidianas y sobretodo más amor a la hora de relacionarnos con nosotros mismos y con los demás. 

10 cosas que me propongo para este nuevo año:

- Estar más en contacto con la naturaleza.

- Actuar sin excesivo apego por el resultado.

- Mimar(me) más.

- Juzgar(me) menos.

- Ser más consciente. Vivir aquí/ahora

Solsticio

Y se acaba el año, un año que ha pasado más deprisa de lo que a muchos nos hubiera gustado, porque nos acostumbramos a vivir sin pausa y los días y las horas cada día duran menos días y menos horas.

Empezar de nuevo

Empezar de nuevo no es lo mismo que empezar de cero, en el primer caso atesoras experiencia, en el segundo no. Y en la vida muchas veces decidimos empezar de nuevo y siempre esta decisión se ve impulsada por la experiencia, porque la experiencia es insaciable e incapaz de detenerse y nos cambia desde dentro, nos hace más sabios, más enteros.

Dejarse llevar esta bien, pero no siempre…

Últimamente escucho mucho el concepto de fluir y dejarse llevar, y la verdad es que todo sería más fácil si confiáramos más y nos dejásemos llevar por lo que sentimos. Pero creo, que este concepto muchas veces se confunde, por eso insisto en la importancia de ir contra corriente, de plantearnos nuestras propias revoluciones personales, de dejarnos llevar sólo por elección.

Dejarse llevar esta muy bien si tenemos claro lo que queremos; entonces a partir de tomar ciertas decisiones y de provocar ciertos cambios que nos conducen a lo que deseamos, en ese momento soltamos, ya no oponemos resistencia, nos abrimos a recibir lo que nos toca…Fluimos.

Sin embargo, dejarse llevar por la masa, por la norma, borra el añadido de la elección. Y es aquí cuando se manifiesta la diferencia. En el primer caso decidimos, en el segundo deciden por nosotros, en ambos nos dejamos llevar, pero la acción de dejarse llevar es bien diferente, incluso opuesta.

La otra causa de todos los males, creernos igual que los demás

No, no somos iguales. Y aceptar esto no implica dividirnos más sino aprender a complementarnos mejor desde la pluralidad.

Somos diversos, afortunadamente! Aunque desafortunadamente cada día nos parecemos más. De cada uno depende el SER auténticos, nadar contracorriente si es necesario.

  

La causa de todos los males: Desconectarse de lo natural

Creo que gran parte de nuestro problema como sociedad

“avanzada” es la gran desconexión que hemos conseguido de lo natural.
Sencillamente no valoramos el poder de la naturaleza y el efecto positivo que
tiene sobre nosotros.

Decidimos cambiar hierba por cemento, árboles por antenas.
Alimentos de temporada y de nuestra tierra, por productos congelados o con
químicos añadidos. El ritmo natural por el ritmo de la producción. Si en algo se diferencia el hombre moderno del no tan
moderno, es precisamente de la perdida de
contacto con lo natural. Y aunque nos pese, esto es así.

¿Qué necesito para ser feliz?

Creo que si de verdad estamos en calma necesitamos muy poco para ser felices. Si observamos, en general, casi todos disfrutamos con las mismas cosas y suelen ser muy simples. Una comida en familia, una puesta de sol, una ducha reparadora, una taza de té caliente, un dulce, desayunar sin prisas, dar un paseo, que nos regalen una flor, disfrutar de un libro, etc.

Sin embargo nos pasamos la vida pensando en como ganar, mientras más dinero mejor, y en comprar muchas cosas que “creemos” nos harán felices. Este estado de “necesidad” constante nos produce ansiedad, y nos aleja de la tan anhelada calma. Entonces todo se vuelve más complicado.

+ Creatividad - Normas

Llevo unos días pensando en esto de las normas… Seguir las normas es ser normal?

Y si en lugar de preocuparnos por ser “normales” empezamos a ser más nosotros, más conscientes, más enteros, más lo que nos gusta, más creativos. En otro post hablaba sobre nuestro poder ilimitado como seres inteligentes y creadores de nuestra propia vida, como seres libres que somos. Creo que lograr esta libertad en parte tiene que ver con saber romper con ciertas normas, con ciertos condicionamientos sociales que no tienen ningún valor real. Arriesgarnos a ser diferentes, permitírnoslo. No hay nada malo en ello. Se trata de no desperdiciar nuestro potencial. Somos seres únicos, hagamos que valga!

¿Empatizar o competir?

*Según la real academia de la lengua empatía significa:

1. f. Identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo de otro.

Es difícil ser empático en nuestra sociedad, sencillamente no nos lo enseñan, de hecho muchas veces se considera un síntoma de debilidad.

Y yo me pregunto por qué? ¿No crees que nos ayudaría a crecer como individuos y como sociedad si, desde pequeños, nos enseñaran a identificarnos un poco más con el otro?

Y si el viaje es hacia ti?

Las personas que me conocen saben que me gusta mucho viajar, siempre fui de la idea que viajar nos ayuda a tomar distancia y ver las cosas desde otra perspectiva. Cambiar de aires siempre sienta bien si uno no sabe muy bien lo que necesita, si no esta claro. Además del añadido, no menos importante y muy enriquecedor, de aprender  y entender otras formas de concebir la vida, otras culturas.

Pero, qué pasa cuando el viaje que nos proponemos es hacia dentro?

A través de este blog les propongo que hagamos las maletas con todo lo necesario para emprender un viaje, pero esta vez el viaje será hacia ti. Y ya verás que no necesitarás mucho equipaje, de hecho mientras menos pesado te sientas, menos pesado se hará el camino. En esta travesía, no nos centraremos en el destino sino que intentaremos saborear todo aquello que vayamos descubriendo, disfrutando de las sensaciones y degustando nuestras emociones.

A veces somos nosotros mismos los que construimos celdas en nuestra vida. Nos limitamos a pensar que no podemos conseguir lo que queremos, que son sólo sueños inalcanzables, que somos muy jóvenes o muy viejos para hacer lo que deseamos, que es “imposible”, que no podemos y otras excusas. Entonces ocurre que nos olvidamos que somos libres. Sí, libres de escoger y libres también de equivocarnos. Libres para soñar. Libres para hacer realidad nuestros sueños. Libres para ser lo que queremos SER.

Bienvenidos

¿Empezamos?

El primer post :) y un largo camino por recorrer. Se abre un espacio para expresarnos y soñar. Y para que todo lo que soñemos luego se haga realidad. Porque la magia existe en las pequeñas cosas, solo hay que estar atentos, ser sensible a ello.

Este es el comienzo del viaje, un viaje de ida para reencontrarnos con nuestra verdadera esencia. Que las dudas no nos detengan, todo lo contrario, que sean el motor del cambio que necesitamos.